Tal y como explicamos en Falsos mitos en torno a la minería I, existen múltiples prejuicios en torno al trabajo minero, pero gran parte de la leyenda de la minería en España no es cierta o ya no tiene cabida en los estándares actuales. Por lo tanto, es momento de seguir desmintiendo los bulos socialmente aceptados pero que nada tienen que ver con la realidad minera en toda la UE, y especialmente en España en 2022:
Las minas, después de extraer el mineral, no sirven para nada
Es curioso el salto de apreciación que suele haber en este aspecto con las villas y las cuencas mineras: en principio se duda de su utilidad o beneficio, tanto a corto como a largo plazo, para la comunidad y, después de extraer el mineral y haber potenciado socioeconómicamente todo el entorno de la mina, se critica que no sirva para nada. Más tarde, cuanto ser restauran las instalaciones mineras para uso museístico, experimental o turístico vuelve a ser el orgullo del lugar.
Todo este proceso de reconversión que, con tantos buenos resultados, hemos experimentado en España con las antiguas minas romanas, es totalmente replicable cuando se terminen de explotar las actuales. El mejor ejemplo de aprovechamiento de una mina de oro post valor extractivo es, sin duda, las Las Médulas, un enclave declarado Bien de Interés Cultural en 1996, en atención a su interés arqueológico y con la categoría de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Hoy en día es un reclamo turístico internacional y sigue proporcionando a todo el Bierzo unos beneficios económicos y de relevancia que no paran desde principios de nuestra era, y todo gracias a la actividad minera y su progreso.
La minería es una actividad obsoleta de otro tiempo
Un clásico entre los falsos mitos, minusvalorar a la minería catalogándola como una profesión en “blanco y negro”. Sin embargo, no existe una industria más estratégica en el eje de la transición energética y ecológica que los materiales: la mayoría de los avances en sostenibilidad se basan en el uso de nuevas tecnologías, y el pilar básico de estas son los minerales. Por lo tanto, la base para la descarbonización de nuestra sociedad parte de la minería, todo lo contrario a lo que suele inducirse con respecto al sector.
Además, el hecho de que los minerales estratégicos sean tan poco habituales en la naturaleza los hace aún más preciados, por lo tanto, el tener acceso a ellos dota a quien lo posea de una clara ventaja competitiva en el mercado mundial. En España tenemos una gran riqueza mineral, y su explotación permitiría a todo el país posicionarse como un enclave tecnológico y de la transición energética, una posición potencial envidiable con respecto a los países de nuestro entorno.
Por todo lo anteriormente explicado, la minería no solo no es una industria del pasado, todo lo contrario, es la mayor y mejor apuesta de futuro para una sociedad cuyo objetivo es ser climáticamente neutra y libre de carbono: la sostenibilidad es minería.
La legislación sobre minería es muy permisiva
Otro bulo entre la sociedad española y cuyo único origen es el tratamiento de los medios de comunicación de la minería del carbón y de las difíciles condiciones laborales de la minería antaño. Pero si por algo se ha caracterizado la minería es por protagonizar la lucha por un trabajo digno, seguridad, buenos salarios y todo tipo de mejoras laborales. Se recuerda esa lucha y esos avances, pero no se actualiza la visión de la minería, un hecho incomprensible. Aún por encima, cualquiera que se interese un mínimo por la minería sabría diferenciar las necesidades y requisitos de cada tipo de minería. Pero sin entrar en tanta especificación, la propia legislación española es muy exigente, tiene estándares propios muy altos en términos de calidad y seguridad, similares a los de países del norte de Europa. Si alguien quiere más concreción puede consultar Legislación minera en España: exigencia pura, una recopilación de todo el régimen jurídico que regula la minería en España.
En definitiva, hoy en día la extracción de cualquier material no es perjudicial para el medioambiente si se hace acorde a la ley vigente y con la tecnología adecuada y moderna. La evolución de este sector y la correspondiente legislación actual han logrado que, actualmente, la minería sea una apuesta sostenible para lograr la transición energética.